Triple de probabilidades de sufrir una intervención por hernia ventral en función del lugar de residencia

El Grupo ATLAS de Variación en la Práctica Médica en el SNS ha llevado a cabo un estudio sobre la variabilidad en intervenciones de Cirugía General

En el estudio se describieron la variabilidad de las intervenciones hospitalarias ocurridas en el año 2002 por colecistectomía, hernia inguinal y hernia ventral. Se analizaron las intervenciones realizadas en población mayor de 65 años de 147 áreas de salud de 14 CCAA.

En las 147 áreas de salud participantes, con una población de 5.388.456 habitantes mayores de 65 años, se produjeron un total de 14414 intervenciones por colecistectomía, 18896 por hernia inguinal y 5252 por hernias ventrales, lo que suponen unas tasas crudas por 10.000 habitantes de 26,74, 35,06 y 9,74 respectivamente.

Estadísticos de variabilidad

Cabe destacar que la colecistectomía y la hernia inguinal se presentan como intervenciones de baja variabilidad: razón de variación (RV5-95), excluyendo el 10% de áreas con valores extremos (5% por cada lado), de 2,79 y 5,02 y coeficiente de variación (CV5-95) de 0,25 y 0,28. En la intervención por hernia ventral, la RV5-95 fue de 5,10 con un CV5-95 de 0,37, calificándose como intervención de variabilidad moderada.

En promedio de las 14 CCAA estudiadas, 1 de cada 45 personas y una de cada 30 sufrirán una intervención por colicestectomía o por hernia inguinal a lo largo de su vida. Estas cifras variarán relativamente poco en función del área de salud de residencia. Respecto a la hernia ventral, 1 de cada 70 personas sufrirá una intervención por hernia ventral. Sin embargo, para los que residen en algunas áreas de salud esta probabilidad puede descender hasta 1 de cada 125 personas, mientras que para los que residen en otras áreas serán de 1 cada 45 personas, casi el triple.

Las Variaciones en la Práctica Médica han sido descritas en numerosos estudios. En ellos se ha observado que, por lo general, los procesos de baja variabilidad se asocian a situaciones en las que existe un amplio acuerdo clínico sobre la pauta de tratamiento más adecuada. Por el contrario, los procesos de elevada variabilidad se asocian a aquellos en los que se da un gran componente de discrecionalidad médica ya sea por incertidumbre, ignorancia o incapacidad de tener en cuenta las preferencias de los pacientes en la relación riesgo-beneficio.